Vengo a Pagar

Mire usted por donde

va a tener usted suerte,
que hoy vengo dispuesto
a pagar el precio a su desprecio
y a marcharme con lo puesto.

Haga usted la cuenta
de lo que le adeudo.
Saque usted sus burlas,
su altanería, su hipocresía,
su risa torcida y sus silencios.

No voy a discutirle el precio,
pues sé que es perder el tiempo.
Voy a pagarle todo,
así que, saque su veneno
y no se ponga nervioso.

Que sé que he de pagar
el precio de su envidia,
de su ignorancia y su maldad.
Sé que la libertad se paga
y estoy dispuesto a pagar.

Dígame a cuánto asciende
su innato rencor,
su dañina presencia,
su odio, su vanidad
y su falso pudor.

Dígame hasta dónde
es capaz de llegar
su retrógrada visión,
su manifiesta incapacidad
para entender el amor.

Ponga usted el precio,
que le quiero pagar;
que cueste lo que cueste
va a salirme barata
la libertad.

Usted no puede entender (y me hago cargo)
que me resulte barato.
Que no puede entender
que sea un negocio
librarme de usted.

Pues se lo voy a explicar
pero de otra manera;
para que le quede claro,
para que usted lo entienda,
puede usted irse a la mierda.

Ahora páseme la factura
por decir la verdad,
por pensar como pienso,
por decir lo que digo
y atreverme a soñar.



"Que sirva de precedente" © Rafa Chevira