Carmen, estoy de acuerdo contigo en lo de las miradas de mierda. Cuánto a empobrecido todo esto la falocrática visión del sexo. Relegaron a segundo plano las miradas, las caricias, los olores, los susurros, la saliva... Se olvidaron de la fantasía, el morbo, los excesos... Se quedaron atrapados en su mirada de mierda, sin percatarse que el placer tomaba otros derroteros. Gracias Carmen por tu comentario. Espero verte por aquí... aunque sea de vez en cuando. Besos.
Sin duda cierto, aunque mucho peor es usarlo y tener una mirada de mierda, me quedo con la mirada penetrante. Carmen
ResponderEliminarCarmen, estoy de acuerdo contigo en lo de las miradas de mierda. Cuánto a empobrecido todo esto la falocrática visión del sexo.
ResponderEliminarRelegaron a segundo plano las miradas, las caricias, los olores, los susurros, la saliva...
Se olvidaron de la fantasía, el morbo, los excesos...
Se quedaron atrapados en su mirada de mierda, sin percatarse que el placer tomaba otros derroteros.
Gracias Carmen por tu comentario. Espero verte por aquí... aunque sea de vez en cuando. Besos.